1. El inicio de la inmigración japonesa al mundo
Se dice que bajo la solicitud del rey de Hawai, en 1868 cruzaron 150 personas, siendo éste el principio de la inmigración japonesa al mundo. Posteriormente, en 1885 se concreta el tratado de emigración, entre el gobierno del Japón y el reinado de Hawai. Más adelante cuando Hawai llega a formar parte de los EE. UU., se inicia la emigración hacia este país.
La mayoría de los inmigrantes eran agricultores, y más de la mitad de ellos tenían por objetivo la restauración de la situación económica de sus hogares; se dice que más bien cruzaron para trabajar pero sin tener por objetivo la residencia definitiva.
Pero, de acuerdo a KOKARON (Un grupo de personas que pensaban que la raza amarilla era problemática), se reglamentó la ley que prohíbe la emigración japonesa, hacia los EE. UU.. Por otra parte, después de la disolución de esclavos en América del Sur, se carecía de gran cantidad de mano de obra en las plantaciones a grandes escalas de café y de goma, y fue entonces que se inició la emigración en masa a Perú y Brasil como mano de obra alternativa.
2. El transfondo de la inmigración al Paraguay
A causa de las diferencias entre los emigrantes japoneses y quienes los contrataron en reemplazo de los esclavos, las disputas entre ellos no cesaron, causando así la huída de los inmigrantes que soportaron grandes presiones.
En Brasil, el movimiento anti-inmigración de japoneses se acrecentó, y el Ministerio del Exterior teje conjeturas sobre la posibilidad de emigrar hacia otros paises. El entonces embajador de la Argentina, percibe el sentimiento de bienvenida del gobierno paraguayo (el entonces presidente, Eusebio Ayala) y en 1930 presentó el “plan de colonización paraguaya”, no pudiendose concretar debido a que la reacción del gobierno japonés no fué clara.
Posteriormente en 1934 toma más fuerzas el movimiento anti-inmigración de japoneses, y el gobierno Brasileño implementa “la segunda restricción de inmigración” (la cual prohíbe que exceda el 2% de los residentes) lo cual hizo que la cantidad de inmigrantes que llegaba a 20.000 por año deba disminuir a 2500, esto hizo que se acelere los preparativos para la emigración hacia el Paraguay. Y así, al año siguiente en 1935, 100 familias obtienen el permiso de entrada al Paraguay.
Sin embargo, después de la Guerra del Chaco desatada entre los años 1932 y 1935, el nuevo Gobierno de Rafael Franco afirmó que “su gobierno no autoriza el permiso de entrada al país, pues fué expedida por la administración anterior” y los preparativos de emigración fueron suspendidas por un tiempo, pero gracias a las negociaciones, el 30 de abril de 1936, según Decreto 1026, el gobierno paraguayo decide otorgar permiso de entrada a 100 familias en forma experimental.
3. La inmigración antes de la guerra
La selección de la zona de inmigración, fue realizado bajo control directo del Ministerio de Colonización, con respecto a las relaciones extranjeras, y en cuanto al público en general, la venta de las tierras de colonias y los permisos de entrada al país, fue realizado a nombre particular del entonces director de la cooperativa de colonización del Brasil, filial de la Federación de Cooperativas de Inmigrantes del Exterior. Esto, en la segunda guerra mundial eximió de la situación de ser confiscadas como bienes de los países enemigos.
Posteriormente, en cuanto a las colonias, éstas fueron administradas directamente por el Ministerio de Colonización y en el Ministerio de Colonización del Brasil fue constituída el Ministerio de colonización del Paraguay.
En marzo de 1936, se realizó la investigación para la selección de las tierras de colonización, y de 3 zonas fue seleccionada la zona actual de LA COLMENA. En las impresiones que tuvo el Sr. Kasamatsu(segundo Presidente de la Federación de Asociaciones Japonesas del Paraguay) y quien desde ese entonces se dedicó a esa investigación, dice lo siguiente:
“Cuando llegué a esta tierra para la investigación, eran las 11 horas de la noche, con el frío y el hambre estaba extenuado física y espiritualmente, y encima de todo fuí atacado por chinches. Pero en la mañana siguiente, ?Qué escena es la que se avistaba ante nuestros ojos?, era el mismo paisaje del campo de nuestra madre patria. Al tener contacto con estas tierras, comparamos con el insípido San Paulo, y no podiamos dejar de dudar de nuestros propios ojos. En nuestros corazones sentíamos la sensación como de en sueños, y así contemplamos fascinados los alrededores de la zona. (según libro aniversario de los 20 años de historia de La Colmena)
El 15 de mayo de 1936, el personal del Ministerio de Colonización del Paraguay, ingresaron en la zona, y emprendieron el primer paso de construcción, en junio del mismo año, llegan de Brasil orientadores, y en agosto llegan al Paraguay los primeros inmigrantes.
En los inicios de la COLONIA LA COLMENA, fué un camino lleno de dificultades; el corto periodo de preparación, los grandes daños causados por ataques de saltamontes, hicieron que unos y otros dejen el campo.
En 1941, al iniciarse la 2da Guerra Mundial, el govierno paraguayo declara la ruptura de las relaciones internacionales con el Japón, Alemania e Italia. A consecuencia de ello, además de que la asistencia del gobierno japonés y emigración hacia el Paraguay fue suspendida, los inmigrantes japoneses fueron tratados como extranjeros de país enemigo, y se prohibía las clases de idioma japonés y la conformación de grupos o asociaciones como la Asociación de Jóvenes japoneses, y además de todo ello, la colonia LA COLMENA fue convertida en territorio de asilo de japoneses.
4. La inmigración después de la guerra
Después de que Japón pierda la guerra, hubo una superpoblación de más de un millón de personas repatriadas y evacuadas que llegaron desde diferentes partes de Asia.
Y esto fué lo que inició la etapa de emigraciones en la historia del Japón, como una alternativa de solución para esa superpoblación.
1952, a nombre del fundador de LA COLMENA, 120 familias obtuvieron el permiso de entrada al país, y así se inicia la colonización de CHAVEZ en 1955. Sin embargo, debido a la contra de una parte del Ministerio del Exterior, se prosiguió sin que estén hechos los preparativos de recepción en la zona, como tampoco que estén listas las parcelas. Esto causó que deban explotar selvas virgenes por sí mismos y llevar prácticamente una vida que les alcanzaba solamente para autoabastecerse.
Los inmigrantes llegaban unos tras otros, sin que existiera tiempo para que las instalaciones estén listas, y en junio del mismo año, cuando llegaron el 4to. grupo de inmigrantes en Chávez, ya no habia parcelas para su distribución. Y la empresa NIHON KAIGAI SHINKO KABUSHIKI GAISHA(JICA en la actualidad), que fundó la colonia FRAM, hoy llamado COLONIA LA PAZ.
La cantidad de inmigrantes que llegaban, superaban claramente a la velocidad en que se preparaban las distribuciones de parcelas y que estén listos los preparativos de aceptación de inmigrantes, lo que hizo que las parcelas estén completamente ocupadas en la zona de FUJI en 1955, y en LA PAZ y SANTA ROSA en 1960. Los inmigrantes fueron puestos en una dificultad extrema por todas estas causas mencionadas.
Dentro de la historia de la inmigración, la colonización del Amambay presentaba una característica peculiar. Se llevó a cabo mediante un contrato laboral en plantaciones de café en 1956. Grande fué la sorpresa cuando llegaron a esta zona, no tenian ni vivienda ni las instaciones básicas, y el transfondo resultó que debian realizar trabajos en reemplazo de los esclavos, las condiciones de trabajos tan severas hizo que no cesaran las personas que se retiraran. En 1958 esa empresa quebró. Los inmigrantes tuvieron que buscar tierras y empezar a reestablecerse por sí solos.
Por otra parte, la empresa NIHON KAIGAI SHINKO KABUSHIKI GAISHA, se anticipa en que la colonia FRAN esté completamente ocupada, y funda ALTO PARANA, actualmente llamado COLONIA PIRAPO. Y procede a iniciar las obras para alistar las instalaciones y nuevas rutas viales, antes de recepcionar al nuevo grupo de inmigrantes, teniendo en cuenta las dificultades de la experiencia anterior.
En agosto de 1960 se inicia la colonización. Pero se presentaron dificultades como que las instalaciones fueron básicas, la zona estaba alejada a 80 kms. de distancia de la ciudad principal, y que en tiempos de lluvia las rutas eran clausuradas y al final resultaban aisladas en selvas vírgenes, tal como ocurria en otras colonias.
Al año siguiente en agosto de 1961, de acuerdo al tratado de inmigración firmado entre el Japón y el Paraguay, se fundó la colonia Yguazú. Esta colonia teniendo en cuenta experiencias anteriores fué fundada sobre una ruta internacional que une Asunción con el Brasil, y tomó como modelo FRAM Y CHAVEZ. En el año 1963 comenzó la inmigración a esta colonia, pero por motivos del rápido crecimiento de la economia japonesa, la cantidad de inmigrantes empezó a disminuir, y continúa hasta la actualidad.
5. El impacto de los inmigrantes japoneses a la sociedad paraguaya
Los esfuerzos hechos por los primeros inmigrantes japoneses en LA COLMENA, para superar las tantas dificultades que tuvieron dentro de condiciones difíciles de aceptación, y de la realidad de empezar abriendo pasos en selvas vírgenes, hicieron que ante los ojos del Paraguay se vean reflejadas como personas dedicadas y trabajadoras, y consiguieron gran confianza para los inmigrantes japoneses venideros.
Fué grande la contribución en el campo de la agricultura al cultivar productos no cosechados en Paraguay, mejorando en la vida alimenticia.
Actuamente en el Paraguay habitan 7.000 inmigrantes y descendientes japoneses, comparando con otros paises es una población minoritaria pues llega a ser solamente el 0.14% de la población total del Paraguay, pero en una de las producciones principales de la economía paraguaya que es la soja, los inmigrantes japoneses que se dedican a la explotación de ella es del 7%, y cierran el 40% de la suma total de la exportación nacional, convirtiendose en el 4to país mayor exportador de soja en el mundo. En cuanto a la siembra directa que fue implementada por los inmigrantes japoneses es altamente calificada.
Y el trigo, que anteriormente era un producto de importación, actualmente el 29% producen los inmigrantes japoneses, y no solo sirven para el abastecimiento nacional sino contribuyen a la exportación.
Se puede decir que el alto grado de técnicas y la calidad de producción contribuyeron a sostener la economía agrícola de este país. Actuamente, los nikkei son calificados como personas sinceras, rectas y dedicadas en diferentes ramas.
También en cuanto a la asistencia por parte de Japón en la parte de Desarrollo, ODA (Asistencia Oficial para el Desarrollo) hasta el año 1994 era el 55% del total, y 70% de asistencia en cooperación con 2 países.
6. La situación actual y el futuro de la sociedad japonesa en el Paraguay
Como se ha dicho antes, la población de la colectividad japonesa en el Paraguay es de 7.000 habitantes. Inicialmente la inmigración se realizó con objetivos de explotación agrícola, pero actualmente no se encuentran sólo en las colonias sino que se desempeñan en labores industriales, financieras y comerciales en ciudades como Asunción, Encarnación, Ciudad del Este y otros.
Llegando a ser electos intendentes y a ocupar cargos directivos en las colonias Pirapó y La Paz.
En cada colonia, las cooperativas agrícolas y las Asociaciones Japonesas se dedican al bienestar social, obras viales, seguridad y otras actividades, realizando sus gestiones con autonomía, lo que hace que se desempeñen como complemento de la política de cada zona y contribuyendo a la mejora del ambiente en general, en la zona y sus alrededores.
Sin embargo, a causa del empeoramiento de la crisis económica del país, trajo consigo el aumento vertiginoso de personas nikkei que viajan al Japón para trabajar, trayendo preocupación en las colonias por la disminución de jóvenes. Para seguir creciendo en lo que han levantado las generaciones anteriores , es necesario que se haga un transpaso de generaciones, y formar a los futuros sucesores.
Gracias al esfuerzo de la primera generación, el Paraguay dentro de la sociedad nikkei de América del Sur, tiene el orgullo de tener el nivel más alto de capacidad en la lengua japonesa, tanto que en cada escuela de idioma japonés de todo el país, se sigue utilizando el libro de literatura que se utiliza en el Japón, enseñándola como lengua materna, aún ahora que han pasado 60 años de la primera inmigración.
Sin embargo, conforme avanzan los tiempos, dismuyen las familias que conversan el idioma japonés dentro de la casa, y también aumentan las personas no nikkeis que se interesan en el idioma japonés, y por estas razones se hace urgente cubrir la necesidad de enseñar el “idioma japonés como segunda lengua” conjuntamente a la enseñanza como idioma materno.
Para poder seguir heredando este elevado nivel, es necesario el desarrollo de personas con alto nivel de formación, que sean reconocidos por la sociedad paraguaya. Para saber las labores educativas que desempeña la Federación de Asociaciones Japonesas mediante el Comité Promotor Educacional Nikkei del Paraguay haga click aquí.
**Para ver la historia de la inmigración por año (1936~2016), haga click aquí